Todos los productos Ibéricos Brisa son el resultado de un proceso de producción artesanal, sin alérgenos, sin colorantes, sin lactosa ni gluten, por lo que son ideales para todos los grupos de consumidores.
Cientos de estudios avalan las bondades antioxidantes del Jamón Ibérico, su alto contenido en ácido oléico y su capacidad para reducir el colesterol y los triglicéridos. Su consumo mejora los niveles de lípidos plasmáticos, reduce la tensión arterial y mejora el endotelio vascular. Cuenta con una proporción muy adecuada de aminoácidos esenciales y aminoácidos libres, formados durante el largo periodo de curación. Es un producto rico en Omega 3, Omega 6 y Omega 9, cardiosaludable y con bajo contenido en sal, siendo además una excelente fuente de proteínas. Esta presencia de proteínas favorece la absorción de otros micronutrientes, como Hierro, Zinc, Fósforo, Potasio, Magnesio y Selenio, de los que el Jamón Ibérico es también una excelente fuente.
Todo ello proporciona al Jamón Ibérico un perfil nutricional equilibrado llegando a ser recomendado su consumo regular como parte de una dieta sana y equilibrada.